La mayoría de los problemas en las articulaciones están causados por:
Lesiones físicas, ejercicio físico excesivo o infecciones.
Recomendaciones a los problemas de las articulaciones
Las personas que sufren dolores y molestias en las articulaciones es recomendable que lleven dietas ricas en:
–Pescados y mariscos, que son ricos en ácidos grasos esenciales. Los cuales, reducen el poder de los compuestos inflamatorios liberados por el organismo.
-Los que sufren de gota, es preferible que consuman complementos de aceite de pescado. Para evitar un posible aumento de los niveles de ácido úrico.
-Se recomienda también, el consumo de frutas y verduras frescas, por su aporte de antioxidantes. Especialmente selenio y vitaminas A, E y C.
Los estudios científicos lo demuestran. Las dietas pobres en estos elementos, predisponen a padecimientos articulares.
El selenio lo encontramos en mariscos, huevos, cereales integrales…
La vitamina A la encontramos en sus precursores, los betacarotenos. Que aparecen en frutas y verduras, como la zanahoria, melón….
Podemos encontrar la vitamina C, en frutas y verduras como cítricos, pimientos, kiwi y otros alimentos.
La vitamina E la encontramos en el aceite de oliva, las nueces y otros alimentos.
Las personas que sufren de problemas en las articulaciones deben evitar sufrir obesidad. Ya que este factor, multiplica las molestias en las articulaciones.
Tratamientos a los problemas en las articulaciones
Los problemas articulares se tratan mediante masajes y fisioterapia. Estas disciplinas ayudan a aliviar tensiones y corregir posturas.
Las afecciones articulares más graves se tratan de manera local, mediante inyecciones de esteroides.
Cuando los trastornos articulares se vuelven crónicos y muy dolorosos, requieren de operaciones quirúrgicas para su solución.
Tipos de problemas en las articulaciones
Codo de tenista
Es la inflamación en el punto donde los tendones se unen a los huesos. Y es el resultado de la realización de trabajos repetitivos sin descanso.
La bursitis
Es la inflamación de la bursa, bolsa que contiene líquido sinovial. Esta protege de los roces entre huesos en las articulaciones.
El hombro congelado
El hombro congelado dificulta el movimiento del hombro de manera crónica y dolorosa.
La artritis un problema de las articulaciones
La artritis es una afección propia de las articulaciones, de la que existen más de 200 tipos diferentes. Se recomienda ejercicio físico moderado y el uso de zapatos acolchados.
Además, es recomendable el consumo de alimentos como:
Pescados, verduras de hoja verde, zanahorias, apio, plátanos, brócoli jengibre…
Entre los tipos de artritis más conocidas se encuentran, la artritis reumatoide y la osteoartritis.
La osteoartritis un problema de las articulaciones
La osteoartritis es una afección degenerativa. Se desarrolla como consecuencia del desgaste del cartílago de las articulaciones. Cuando el cartílago se desgasta, los huesos rozan unos contra otros, provocando dolor y rigidez. Especialmente en días húmedos o después de un ejercicio físico intenso.
Se recomienda aumentar el consumo de cereales integrales, verduras y frutas frescas.
El exceso de peso, aumenta la presión en las articulaciones, principalmente en rodillas y caderas. Aumentando también, el riesgo de padecer osteoartritis. Una dieta sana, baja en grasas, ayuda a prevenir la osteoartritis o a relajar sus síntomas.
Además, el ejercicio físico regular, sin forzar, respetando las limitaciones, es bueno para la artritis. Porque fortalece la musculatura y evita que una parte del peso, lo carguen lo huesos.
La artritis reumatoide
La artritis reumatoide es una afección inflamatoria progresiva. En la que nuestro propio sistema inmunológico, ataca las articulaciones.
Los primeros síntomas, suele aparecer en las articulaciones de los pies y de las manos. En personas a partir de los 25 años y con más frecuencia en las mujeres.
Las estadísticas confirman, que alergias o intolerancias a ciertos alimentos (huevos, cereales y lácteos), predisponen a sufrir esta enfermedad.
Las grasas poliinsaturadas conocidas como omega 3, tienen efectos anti-inflamatorios, recomendables en casos de artritis reumatoide. Las personas afectadas por esta enfermedad, deberían comer pescado rico en omega 3, al menos un par de veces por semana.
Podemos obtener ácidos grasos omega 3 en forma de cápsulas de aceite de pescado o ingiriendo pescado fresco rico en omega 3 como por ejemplo:
Las sardinas, el salmón, la trucha, el bacalao, el arenque…. Los vegetarianos pueden obtener omega 3 de las semillas de soja y el tofu.
Antiguamente se recomendaban pulseras de cobre, para reducir las molestias de la artritis. Las investigaciones modernas, no encuentran una explicación científica. Quizás sentirse mejor, con una pulsera de cobre, puede desarrollar alguna forma de auto-curación.